2013

En Junio del año pasado -sí, increíblemente el 2012 ya es pasado- tuve un espasmódico intento de volver a escribir. En ese momento creí que iba a poder, conmigo y con la vida.

Pero no, Agosto y Septiembre me jugaron en contra.

Hace un rato repasaba posteos viejos y en uno hablaba de estar viviendo los días más complicados de mi vida. Si algo aprendí, es que uno nunca puede arriesgarse con frases como esa. Cuando crees que estás viviendo lo más jodido que te tocó, siempre puede haber más esperándote.

El 2012 fue un año intenso, donde casi creí tocar con las puntas de los dedos el mayor sueño de mi vida. Aunque no se haya concretado, siento al menos que estoy más cerca. Pero tengo que estar atenta, porque hay muchas sombras acechando a ese sueño, y la mayoría de ellas están en mi propio interior. Tengo que cuidarlo hasta de mí misma.

Las expectativas con el 2013 son grandes, espero que esté y estemos a la altura. Por ahora, aquí estoy, reencontrando este lugar tan mío y que ahora me es tan ajeno, donde siempre me sentí libre para expresar todo lo que siento. Y haciéndolo a mi -particular- manera.

¿Damos otra vuelta? Esta vez quiero ganarme la sortija.

0 charletas: